Un empate con sabor a triunfo: Tolima se lo empató sobre la hora a Millonarios y se acerca a la final
Un gol de Anderson Angulo en el epilogo del encuentro, salvando un punto para el conjunto pijao […]
Un gol de Anderson Angulo en el epilogo del encuentro, salvando un punto para el conjunto pijao y complicando el andar de Millonarios.
Se jugaba la cuarta fecha de los cuadrangulares finales, decisiva para ir definiendo los anfitriones de la gran final. Millonarios y Tolima se enfrentarían en lo que sería la revancha de ese 1-1 vibrante en Ibagué, pero esta vez en el coloso de la 57. Los albiazules, necesitado de una victoria, se medirían a los pijaos, quienes buscaban consolidar el liderato del grupo B.
Gamero solo haría una variante respecto al partido en Ibagué, manteniendo el 4-2-3-1 con el regreso de Macalister Silva como el capitán del embajador. Ante la expulsión de Emerson, Andrés Gómez asumiría el papel por la banda derecha del equipo local; mientras que el regreso de “Maca” pondría a Mojica en el banquillo del azul.
Por su parte, Hernán Torres cambiaría el sistema de juego para afrontar el partido en Bogotá, saliendo con un 4-4-2 liderado por Julián Quiñones. El cuadro tolimense contaría con ausencias importantes como Sergio Mosquera y Anderson plata,sumados a William Parra, en el banquillo. Por ende Nieto, Anderson Angulo y Harold Gómez serian las variantes en los once.
Roldán sería el juez en un Nemesio Camacho el Campín a reventar. Se daba la orden e iniciaba el compromiso, que fácilmente pudo interpretarse como un partido de 180 minutos, puesto que ambas escuadras mantenían lo propuesto en el Manuel Murillo Toro: Un Millonarios con posesiones largas que intentaba no dejar respirar a la visita, y un Tolima con posesiones rápidas más apegado a las transiciones por bandas y los balones largos.
Y, así como en el primer encuentro, Millonarios se haría con la ventaja, esta vez de manera temprana. Un cobro de tiro de esquina ejecutado por Macalister Silva se dirigía al primer palo para Uribe, quien se agacha con el objetivo de que el balón siga con su presunto destino a arco. Es allí cuando el balón se desvía en Ángulo, quien marcaba al goleador embajador, y le daba el gol a Millonarios, que se iría por delante en el primer tiempo.
El segundo tiempo, y el partido en general, estuvo marcado por un Tolima con pocas llegadas, muy físico y buscando opciones desde la pelota quieta. Por su parte, el equipo local fue soltó el acelerador tras la consecución del tanto y, más allá de las llegadas que tuvo a lo largo de la segunda parte, fue poco eficaz.
Y, victima de esa falta de eficacia, Millonarios sufriría el empate del equipo pijao sobre el final del partido. Una esquina tras una atajada excepcional de Ruiz sería cobrada por Yohandri Orozco, ingresado en la segunda mitad. El cobro es peinado por Ramírez hacia el segundo palo, donde Juan Pablo Vargas rechaza al medio del área, dejando el balón servido para Ángulo capture el rebote en soledad y empate el partido para la alegría del cuadro tolimense.
A pesar de los intentos de Millonarios por irse por delante tras el tanto de Ángulo, Roldán se llevo el silbato a la boca, declarando el empate en el marcador. Con Macalister como la figura del encuentro, Millonarios se complico rumbo a la final, ya que con el empate los de Gamero ya no dependen de si mismos para quedar como líderes de grupo.
En la otra cara de la moneda, el empate pone a Tolima a puertas de la clasificación, consolidándose con 8 puntos en la cima del grupo B, buscando un doblete de victorias en las últimas fechas del cuadrangular que le permitan luchar por su cuarta estrella, la segunda en línea.